El grupo D y el mejor del mundo
El debate en torno al mejor jugador de la historia ha estado durante mucho tiempo tan lleno de argumentos, que habría como para llenar completa una biblioteca. Para muchos Pelé, ganador con la verdeamarelha brasileña en los Mundiales de Suecia ‘58, Chile ‘62 y México ‘70 es sin dudas el candidato más lógico. Otros prefieren a Diego Armando Maradona, estrella de una magnífica y coral Argentina que reinó en tierra azteca en 1986, e ídolo planetario desde Nápoles hasta Buenos Aires, ciudades en donde llenó por igual de alegrías el corazón de los hinchas partenopei y también de los xeneizes, fanáticos de Boca Juniors.
En la candidatura pudieran incluirse también el argentino Alfredo Di Stéfano, el holandés Johan Cruyff, el alemán Franz Beckenbauer, los brasileros Ronaldo Luis Nazario de Lima y Ronaldinho Gaúcho, el francés Zinedine Zidane, y en estos tiempos también podría sumarse un portugués de nombre Cristiano Ronaldo.
Pero resulta que en esa misma «pelea» hay otro hombre, nacido como su ídolo Maradona en la tierra al oeste del Río de la Plata. Su nombre es Lionel Messi, y Rusia es el sitio en donde una vez más intentará despejar cualquier duda en torno a su derecho al trono futbolero.
Con la albiceleste jugará en la llave D del torneo, que será nada menos que el cuarto de su carrera. Atrás han quedado las decepciones de Alemania, Sudáfrica y Brasil, en donde estuvo más cerca que nunca de alcanzar su premio más ansiado.
Como ha declarado Jorge Sampaoli, técnico suyo en esta ocasión, el fútbol ya le debe un Mundial al «bajito» de Rosario, quien a partir de junio próximo asumirá de nuevo el reto que junto con antiguos colegas y nuevos astros como son Ángel Di María, Paulo Dybala, Sergio Agüero, Javier Mascherano, y quien sabe, a lo mejor también Gonzalo Higuaín.
Claro que para iniciar el recorrido hacia lo más alto, Messi y su tropa tendrán que superar un primer paso, y para ello se toparán en el camino con tres obstáculos nada fáciles. Los artífices del reto inicial viajarán hasta el Gigante Euroasiático desde una isla situada en el extremo noroeste de Europa, la cual hasta hace poco tiempo nadie habría sido capaz de localizar en un mapamundi por otras razones que no fueran los volcanes y la actividad geológica.
Y es que desde su participación en la Eurocopa de hace dos años, celebrada en territorio francés, los «vikingos» de Islandia sorprendieron al planeta con su particular manera de vivir el fútbol, que les valió para meterse en cuartos de final del evento y derrotar en el proceso a un coloso como Inglaterra.
Ahora llegarán al segundo torneo de envergadura de toda su historia encabezados por su técnico, el carismático Heimir Hallgrímsson, y depositarán su fé en hombres como Gylfi Sigurdsson, Aron Gunnarson, Alfred Finnbogason y el veterano Eidur Gudjohnsen, responsables de mantener vivo sobre la cancha el legado de sus aguerridos antepasados.
Luego de enfrentarse a los nórdicos, será el turno de medirse a Croacia, una selección que cualquier «desconectado» pudiera cometer el error de subvalorar, pero que pudiera ser en mi opinión el más duro reto de este primer momento para los suramericanos.
A pesar de no concretar actuaciones a la altura de su potencial en las más recientes pruebas de magnitud, los balcánicos que dirige Ante Cacic son un conjunto que lleva trabajando varios años, y que cuenta con figuras de élite como Luka Modric, Iván Rakitic, Mateo Kovacic, Ivan Perisic, Mario Mandzukic y Andrej Kramaric, por citar solo algunos de sus más ilustres integrantes.
El último, pero nunca menos importante episodio de las aventuras argentinas en la clasificatoria, tendrá como co-protagonistas a unos viejos conocidos, las Súper Águilas de Nigeria, con quienes compartirán grupo por quinta vez en este tipo de competencias, luego de que se enfrentaran a ellos en las citas de Estados Unidos ‘94, Corea-Japón ‘02, Sudáfrica ‘10 y Brasil ’14.
Aunque los africanos nunca han vencido a la albiceleste en Copas del Mundo, tampoco es que hayan sido un hueso «blando», y siempre han vendido cara su derrota. Con ese precedente, de seguro veremos un gran choque en el que se combinarán la experiencia de John Obi Mikel, Obafemi Martins y Shola Ameobi con l sangre nueva que aportan Kelechi Iheanacho, Victor Moses y Ahmed Musa.
Calendario de partidos del grupo D:
16 de junio: Argentina-Islandia (Moscú) y Croacia-Nigeria (Kaliningrado).
21 de junio: Argentina-Croacia (Nizhni Novgorod) y Nigeria-Islandia (Volgogrado).
26 de junio: Nigeria-Argentina (San Petersburgo) e Islandia-Croacia (Rostov).
