Litio boliviano con estilo alemán
Bolivia cuenta con la mayor reserva mundial de litio y ha decidido explotarla en serio. Para ello ha tomado la decisión de no continuar la fallida tendencia de los países con economías empobrecidas de exportar la materia prima, sino que exportará productos derivados del litio, y producidos en la propia Bolivia. Bien por ella. Ya en 2017, con la creación del Ministerio de Energía, el gobierno hizo pública su intención de invertir fuertemente en la producción de energía renovable y litio, estrategia que, junto a la producción nacional de gas, posicionaría al país como centro energético de América Latina.
Pues bien, recientemente, tras abrir una licitación para que inversores extranjeros se enrolaran en la industrialización del litio, el país decidió firmar contrato con la empresa alemana ACI Systems, privilegiándola sobre otras siete compañías provenientes de China, Rusia y Canadá. La firma europea tendrá a su cargo el levantamiento de la planta de fabricación de baterías de litio ubicada en Uyuni.
Según especialistas económicos este es un acuerdo sin precedentes en el sector minero boliviano y también en cuanto a las relaciones comerciales de Alemania con los países en vías de desarrollo. El país germano ha aceptado el acuerdo donde Bolivia controla el 51 por ciento de la sociedad y donde los productos derivados del procesamiento del litio, como las baterías, se producirán en este país.
A investigadores de varios institutos de la región no parece sorprenderles la decantación de Bolivia por la empresa teutona, pues el país en general es un gran productor de automóviles, industria esta donde el litio es una materia prima fundamental, y que sin duda sería uun excelente mercado para las baterías bolivianas. Tampoco es de desdeñar la alta capacidad y rigor tecnológico de los alemanes. En fin que Las expectativas de la administración de Evo Morales en cuanto al procesamiento de este codiciado recurso son altas, pues al inaugurar el Ministerio de Energías el pasado año aseguró que el país podría llegar a percibir holgadamente más de 1 500 millones de dólares provenientes de la venta de materiales catódicos y baterías de litio. La aspiración, aseguró entonces el mandatario, es que en poco tiempo el país pueda establecer el precio global del también llamado oro blanco.
Para quienes aún no perciben la importancia de este mega proyecto y lo determinante de su organización estratégica para la soberanía económica o no de Bolivia, les recuerdo que el litio es considerado actualmente la materia prima del futuro, por múltiples usos en la industria tecnológica. Mire solo a su alrededor, contar con suficiente de este material es clave para el desarrollo de la telefonía celular, la computación, los autos eléctricos…, por solo mencionar unos ejemplos.
En el mercado internacional una tonelada de este mineral puede cotizarse hasta en 7000 dólares la tonelada. Aunque a diferencia de otros minerales, su precio depende de acuerdos comerciales y no de las cotizaciones en la bolsa.
La planta que pondrá en explotación ACI Systems fue diseñada en el 2015 por la también alemana K-UTEC AG Salt Technologies. Y nada que no debemos perder de vista a Bolivia y su estrategia energética, donde el litio es solo uno más de los engranajes.